Red, quien está siendo entrenado por los biomantes para convertirse en un despiadado asesino, se ve cada vez más absorbido por las intrigas palaciegas. En su nuevo papel aprenderá que incluso la vida entre la nobleza puede ser peligrosa.
Mientras se dedica a aterrorizar barcos imperiales como la pirata Dire Bane, Hope descubre una conspiración biomante de un alcance tan increíble que incluso la masacre del pueblo de su infancia parece nimia en comparación.
Con
los biomantes cerrando su cerco de terror alrededor el Imperio, Hope y Red
luchan por encajar en sus nuevos papeles y responsabilidades, pero el precio
será más alto de lo que pensaban.
Aprovechando que estos días son
festivos, por fin he podido ponerme y reseñar una de las varias lecturas que
tenía pendientes. Para hoy toca El demonio de las sombras, la segunda entrega
de El Imperio de las tormentas, novela que reseñé hace unas cuantas semanas y
que tanto me sorprendió para bien (Aquí podéis leer la reseña).
La acción nos sitúa un año después de
lo ocurrido en al anterior libro, aviso que algún spoiler de la primera entrega
voy a dejar caer, así que si no queréis seguir leyendo os podéis pasar
directamente a la parte en la que hablo de lo que me ha gustado y lo que no.
Hope y Red se vieron obligados a separarse por culpa de los biomantes y todavía
no han podido reencontrarse. Hope se ha atribuido el nombre del pirata más
famoso de la historia del Imperio y bajo el nombre de Bane el Osado hostiga junto
a su tripulación a los imperiales y sobre todo a aquellos que trabajan con los biomantes.
Aunque ella no lo sabe, Red la protege desde la distancia, y es que el joven
aceptó unirse a los biomantes a cambio de que dejarán a Hope en libertad y no
le causarán ningún daño. En su nueva vida, Red debe de compaginar un exigente entrenamiento por parte de los biomantes, que parecen dispuestos a convertirle en algún
tipo de arma letal, con sus compromisos sociales en la corte imperial. Y es que
Red ha heredado el título nobiliario familiar y además se ha convertido en
amigo del príncipe heredero del Imperio, lo que le traerá bastantes dolores de
cabeza.
Al estar separados los dos
protagonistas, la trama sufrirá el mismo destino y se dividirá en dos sub tramas
principales bien diferenciadas. En una veremos como Hope descubre un horrible
plan creado por los biomantes, que amenaza la vida de cientos y cientos de
niños y niñas por todo el Imperio. Los recuerdos de su infancia afloraran en la
mente de la joven y harán que Hope no dude ni un instante a la hora de
interponerse en los planes imperiales. ¿El problema? Que esta vez necesitará más ayuda que la de sus amigos y su
barco, por lo que deberá de ir en busca de cualquier aliado que esté dispuesto
a ganarse la ira del Imperio.
Al mismo tiempo, Red se verá envuelto
en toda clase de intrigas palaciegas, pero sobre todo en una que puede ser
vital para el futuro del Imperio. Unos embajadores del misterioso país de
Aukbontar han aparecido en escena para entablar negociaciones con el Imperio.
Pero por lo visto, esta idea no agrada a todo el mundo, ya que alguien ha
enviado a un asesino letal para que acabe con los miembros de la embajada. Rodeado
de petimetres incapaces siquiera de vestirse por sí mismos, tendrá que ser Red
quien investigue e intente detener a ese asesino y así evitar un conflicto diplomático
que podría terminar en una gran guerra.
El final de la historia nos llega tras
bastante acción y algún que otro disgusto, ya me entenderéis cuando lo leáis, y
nos encamina de forma bastante evidente hacia la tercera entrega de la saga, en
la que debería dirimirse todo.
Con respecto a las sensaciones que me
ha dejado la novela al leerla, estas han sido bastante positivas. Tanto el
ritmo narrativo, como el estilo de su autor y su prosa, hacen de esta una
lectura ágil y muy entretenida, en la que en ningún momento llegaremos a sentir
pesadez o aburrimiento. Y todo eso a pesar de que la trama no avanza lo que me
hubiera gustado.
Terminando con los personajes, Jon
Skovron mantiene su línea con respecto a la anterior entrega y se confirma que
son estos la punta de lanza de la saga. Veremos bastante evolución en la
mayoría de los protagonistas y secundarios principales, quizás sea Red el
personaje que menos evoluciona, pero ya de por sí era un gran personaje. El
resto, así como los nuevos personajes que aparecen en la historia, cumplen de
forma notable y le aportan personalidad y carisma a la historia.
COSAS
QUE ME HAN GUSTADO:
Ø Los
personajes siguen siendo el punto fuerte de la historia. En esta segunda
entrega veremos la evolución de muchos de ellos, sobre todo en el caso de Hope
y aquellos que la acompañan, así como la aparición de nuevos e interesantes
protagonistas.
Ø Esta
es una novela muy entretenida y divertida, sobre todo gracias al buen ritmo que
emplea Jon Skovron que evita que lleguemos a aburrirnos, y a su estilo
narrativo tan desenfadado.
Ø La
aparición de la gente de Aukbontar dentro de la trama y las diferencias
culturales y tecnológicas que les separan del Imperio. De cara al futuro de la
saga abre muchas posibilidades. Además, Skovron ha sabido llevar muy bien y de
un modo bastante realista este choque cultural entre ambas sociedades.
COSAS
QUE NO ME HAN GUSTADO:
Ø Claro
ejemplo de lo que es una novela puente dentro de una trilogía. La trama cumple
sin más y termina con un desenlace bastante potente para que nos quedemos con
ganas de continuar leyendo. Aunque en este caso se le puede perdonar un poco,
ya que aunque la trama no avance lo deseado, por lo menos los personajes si evolucionan.
CONCLUSIÓN:
El demonio de las sombras confirma a
esta trilogía, como una de las más entretenidas que uno puede leer dentro de la
fantasía actual. Jon Skovron, su autor, ha creado una ambientación bastante oscura
y que transcurre en un mundo implacable, en el que sus brillantes personajes
pueden campar a sus anchas. Esta segunda entrega de la saga mantiene las muchas
virtudes que observamos en su predecesora, pero al mismo tiempo nos ofrece una
trama algo más insípida y que avanza menos de lo que nos hubiera gustado, dándonos
a entender, que su autor se ha guardado todos losases en la manga para la
tercera y última parte de la trilogía. ¿Recomendable? Si leíste la primera
parte y te gustó, es imposible que esta no te guste, aunque puede pasarte como
en mi caso, que te sepa a poco y te quede la sensación de estar frente a la
clásica novela puente. Para los que no hayáis leído la primera parte, pues os
recomiendo que le echéis un ojo a la reseña que publiqué en su día (Aquí la tenéis) y veáis si os convence o no.
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